¿Cuándo Bioestimular o Rellenar en Medicina Estética?
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y, como tal, es susceptible a una variedad de factores externos e internos que pueden afectar su apariencia y salud. La medicina estética ofrece una serie de opciones para mejorar la calidad de nuestra piel, siendo el relleno y la bioestimulación lo más popular.
El relleno es una técnica que utiliza materiales inyectables para agregar volumen y rellenar áreas de la piel que han perdido su firmeza o han sido afectadas por el envejecimiento. Los materiales de relleno más comunes son el ácido hialurónico, el colágeno y la grasa propia del paciente. Estos materiales pueden ayudar a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas, mejorar el contorno facial y agregar volumen a las mejillas y los labios.
La bioestimulación, por otro lado, es una técnica que utiliza inyecciones de sustancias biocompatibles para estimular la producción de colágeno y elastina en la piel. El ácido poliláctico, la hidroxiapatita de calcio, Policaprolactona y la Polidioxanona son algunas de las sustancias utilizadas en la bioestimulación. A diferencia del relleno, esta técnica no añade volumen directamente, sino que ayuda a mejorar la calidad de la piel al estimular su producción natural de colágeno y elastina.
Ambas técnicas tienen sus pros y contras, y la elección entre ellas dependerá de las necesidades individuales del paciente y de las recomendaciones de su médico. Los rellenos son ideales para aquellos que buscan resultados rápidos y notorios, mientras que la bioestimulación es una opción más gradual y natural.
CUANDO BIOESTIMULAR O RELLENAR EN MEDICINA ESTÉTICA?
En general, se puede considerar la bioestimulación en pacientes que presentan:
- Pérdida de elasticidad y firmeza en la piel
- Líneas finas y arrugas
- Textura de la piel irregular
- Cicatrices de acné o de otros tipos
- Flacidez en el área del cuello y la papada
- Pérdida de volumen en las mejillas, el mentón y las patas de gallo
Por otro lado, el relleno se puede considerar en pacientes que buscan:
- Agregar volumen en áreas específicas, como los labios, las mejillas o las sienes
- Reducir la apariencia de líneas finas y arrugas
- Mejorar el contorno facial
- Restaurar la simetría facial
- Reducir la apariencia de cicatrices deprimidas
En última instancia, la decisión entre la bioestimulación y el relleno debe ser tomada en consulta con un médico certificado y experimentado en medicina estética, quien evaluará las necesidades y objetivos estéticos del paciente y recomendará la mejor opción de tratamiento. Además, es esencial seguir las recomendaciones postoperatorias y tomar medidas de cuidado de la piel para garantizar los mejores resultados y minimizar los riesgos de complicaciones.
Finalmente, ambas técnicas de tratamiento estético, se puede complementar partiendo por la bioestimulación y según anamnesis se puede aplicar relleno, potenciando la duración de los tratamientos anti-age en tejido.